En tu vida, ¿hay algo que le hayas dicho a Dios que no haga nada? ¿Algo que sabes que “nunca” podrías hacer?
Hace un par de años, muchas cosas estaban en el aire en la vida. Tantas circunstancias de las que no sabíamos el resultado. Finalmente, llegué al colmo en las conversaciones sobre “qué pasaría si” con Steve, mi esposo, que siempre está dispuesto a cambiar. Y le dije a Steve que quería posponer esa conversación. Había demasiadas cosas en constante cambio. Había demasiadas incertidumbres. ¿No podemos simplemente mantener esto sólido, inmutable?
Incluso cuando las palabras salieron de mis labios, las sentí mal.
¿Limitaré a Dios por mi falta de fe? ¿Le diré que puede que sólo llegue hasta cierto punto en mi vida? ¿O someteré todo lo que tengo, incluso todo lo que me resulta familiar, a Su sacudida? ¿Estaré abierto y buscaré ardientemente el reino, o continuaré en lo que es conocido, seguro y predecible?
El Señor me trajo a Hebreos 12 …desafiándome a estar abierto a la sacudida. Tuve que preguntarme: ¿hay algo en mi vida fuera del alcance de Él? Si es así, entonces permanece como un ídolo en mi corazón, más valioso y más confiable que mi precioso Jesús.
Poner límites a las áreas que Dios tiene permiso de tocar limita Su obra en nuestras vidas. Sí, tenemos la capacidad de influir en el acceso de Dios a nosotros, en su capacidad de obrar a través de nosotros, a través de los límites que ponemos. (Ver Marcos 6:4-5) Jesús – el hijo de Dios – estaba limitado en sus obras debido a las personas que lo rodeaban. Su incredulidad obstaculizó su obra.
¿Estamos limitando la obra de Dios en nuestras vidas debido a la incredulidad? ¿O por miedo? ¿Le diremos que sólo puede llegar hasta cierto punto?
Vivir sin límites es tan básico como rendirse… renunciar a ese llamado “derecho” de decirle a Dios dónde puede o no interferir en nuestras vidas.
Nuestra entrega abre los límites de nuestras vidas a lo ilimitado que Dios quiere desarrollar a través de nosotros. Nuestra entrega abre la ventana desde el aquí y ahora hacia el presente reino de Dios, invitándolo a abrirse camino en nosotros y a través de nosotros.
Mi libro,La Sombra Sagrada , es una invitación a entrar en este misterio diario del reino de Dios... una oportunidad de ver más allá de nuestros límites hacia lo ilimitado de Dios y todo lo que Él está haciendo y anhela hacer en nuestras vidas. ¡Consigue tu copiaaquí !